Tal vez fui tu almohada, creo que sí, fui tu almohada en otra vida, el blando soporte de tu cabeza cubierta por tu hermosa melena alborotada.. Me gustaba ser el resguardo secreto de tus más íntimos sueños, de tus escondidos anhelos.
Tal vez fui tu taza de café, creo que sí, fui tu taza de café en una vida pasada, la primera superficie donde posabas tus labios tibios y aún adormitados… Me gustaba sentirte apenas rozarme, ansiosa por beber el elixir mágico que contenía en mi interior.
Tal vez fui tu gato, creo que sí, fui tu gato en una vida anterior y me encantaba enrollarme en tu regazo, después de haberle dado tres vueltas a tu cintura… Me gustaba alzar los ojos y ver tu mano descender lentamente para acariciarme y luego cerraba los ojos y lo disfrutaba ronroneándote mi amor de regreso.
Tal vez en esta vida me permitas nuevamente ser… Ser tu almohada, tu taza de café, tu gato…Todo al mismo tiempo!
Ana Yanci Moreles
Escucha más poemas
- Aquí no lloró nadie – Otto René Castillo Aquí no lloró nadie.
Aquí sólo queremos ser humanos,
darle paisaje al ciego,
sonatas a los sordos,
corazón al malvado,
esqueleto al […]
- Me gusta pensar que voy a verte – Leunam Me gusta pensar que voy a verte.
No sé en que lugar, ni en que estación o circunstancia.
No sé si hoy, mañana, en unos años o en alguna […]
- Corazón coraza – Mario Benedetti Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a […]
- Horal – Jaime Sabines El mar se mide por olas,
el cielo por alas,
nosotros por lágrimas.
El aire descansa en las hojas,
el agua en los ojos,
nosotros en […]
- Mis ojos, sin tus ojos, no son ojos … – Miguel Hernández Mis ojos, sin tus ojos, no son ojos,
que son dos hormigueros solitarios
y son mis manos sin las tuyas varios
intratables espinos a […]
- Te quiero a las 10 de la mañana – Jaimes Sabines Te quiero a las diez de la mañana,
y a las once, y a las doce del día.
Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo,
a veces, en las […]